La empresa Thalès (Thomson), responsable de todo el mantenimiento del emplazamiento, recurrió a Climalife para que le suministrara un caloportador con una fórmula especial y adaptado a la instalación específicamente para refrigerar amplificadores transmisores de alta tecnología.
El estudio de fórmulas especiales para adaptarlas a las necesidades específicas del cliente es una de las especialidades de Climalife. En este caso se trataba de encontrar un producto que evitara la formación de espuma a las importantes velocidades de circulación, pero que también neutralizara los riesgos de proliferación bacteriana debidos a las múltiples aberturas del circuito para los distintos mandos.
Además, al estar los amplificadores compuestos principalmente de aluminio, los riesgos de corrosión son importantes y deben controlarse imperativamente protegiendo al máximo la instalación.
La fórmula del caloportador Friogel (concentrado al 40 % para una protección de hasta -20 °C) se modificó especialmente para responder más específicamente a esta necesidad y proteger y prolongar así la vida útil de las instalaciones. Así, en esta mezcla se utilizó una concentración modificada de aditivos, entre ellos el antiespumante M y el producto bactericida Biocide B1.
La intervención tuvo que realizarse después de las interrupciones de las transmisiones, entre la 1 y las 5 de la madrugada. Tras vaciar las dos redes y enjuagarlas con agua desmineralizada, el rellenado con Friogel diluido se llevó a cabo con éxito.
Thalès (Thomson) está presente en todo el mercado del mantenimiento de amplificadores a escala nacional. Climalife, parte del Grupo Dehon, ya ha asistido en muchos sitios similares como le Pic du Midi, en Rennes, en Chambéry, en la Torre Eiffel… y, cada vez, para una modificación específica del fluido de transferencia de calor.